Saltar al contenido.

Teoría política (leyes observadas de comportamiento)

Recopilación de leyes poco éticas de comportamiento político observadas en nuestra sociedad.

  1. Es mejor que la gente tenga problemas para que pueda pedir al Estado que le salve.
  2. Si no hay problemas se crean algunos, asegurándose de que los medios de comunicación los pregonan a los cuatro vientos.
  3. Las campañas y los medios permiten tomar el poder, que da el control de los inmensos fondos públicos y la recaudación.
  4. Toda la capacidad de comunicación del partido ha de tender a la toma del poder. Si es preciso se besan niños, se come un bocata en el mercado o se promete la paz en el mundo.
  5. Polarizando la sociedad con un problema imaginario, el pueblo deja de ver la realidad y puede volverse suficientemente ovejuno, admitiendo soluciones imaginarias.
  6. Buscar  un enemigo público reconocible por todos, simplifica las cosas, evita dar explicaciones de mala gestión propia y canaliza el enfado popular.
  7. Defender el privilegio propio hace parecer más grande y con más derechos frente al pueblo llano, facilitando su vasallaje. Hay que ser un honorable a la vista del pueblo, para que este se sienta inclinado a no exigir sus derechos.
  8. Cuando alguien tiene poder suele tener tentación de emplearlo. Lo de la caballerosidad era cosa del Quijote. Si puede usar ese poder para subir los impuestos, esa será la primera acción.
  9. Para tener suficientes votos en el futuro, se empieza por controlar hoy las escuelas. Un árbol joven es más fácil de enderezar. Si los sentimientos inoculados son nacionalistas, los jóvenes estarán dispuestos a defenderlos con entusiasmo ante los habitantes de otras tribus.
  10. Cuanto más descabellada sea una propuesta, menos resistencia produce en el pueblo, pues no hay antecedentes de referencia o anticuerpos. «Seamos realistas, proponiendo o pidiendo lo imposible».
  11. Una vez conseguido el poder, utilizar todos los medios disponibles para mantenerlo, como son las televisiones públicas, los presupuestos, el ataque a la oposición (haciendo oposición de la oposición), los favores concedidos.
  12. Si se fracciona el Estado en regiones, provincias, diputaciones, ayuntamientos, etc. pueden conseguirse ‘premios de consolación’ y gobernar en muchas parcelas aunque no se tenga el gobierno de la Nación. Luego, para qué intentar que haya una Nación grande?

Se admiten aportaciones

2 Comentarios »

  1. Estas observaciones son todas dardos que dan en la diana. La hoja de ruta está ahí para el que quiera verla. El problema está en la atomización de la sociedad. Yo lo sé, tú lo sabes … muchos otros lo saben. Pero estamos aislados. Esa es su fuerza, y la nuestra sería la unión.

    • Gracias, Vicente. Todo esto es muy difícil de cambiar porque es el equilibrio al que hemos llegado espontáneamente en la evolución de nuestra especie y en particular del ‘homo ibéricus’. Lo que se puede hacer es establecer controles mediante la separación de poderes (el Estado Liberal) y no permitir que los políticos se endiosen. Pero hoy por hoy no veo un núcleo sobre el que pueda cristalizar una sociedad de ciudadanos capaz de conseguirlo. No me gusta ninguno de los partidos que tenemos…