La modificación del entorno supone actuar sobre las amenazas y sus efectos, anticipándonos para hacer que estas no tengan impactos tan dañinos sobre nuestros procesos. Para ello conseguiremos que el ámbito legal nos proteja y el contractual sea justo, tendremos una política de responsabilidad que ensalce nuestra imagen y reputación y mejoraremos la calidad y el cumplimiento para no perjudicar a nuestros grupos de interés en su operativa.