El drama del déficit y la escala de medida
Publicado en http://www.castelloninformacion.com el 24 de junio de 2013
Yo no soy economista. Lo digo para que nadie interprete que hablo ex-cátedra acerca de estos asuntos. Sin embargo creo que estoy capacitado para opinar sobre ello, por el mismo motivo que me han hecho co-partícipe y contribuyente, a efectos de tener que pagar las consecuencias, sin preguntarme previamente si estaba de acuerdo.
Antes de seguir diré que, como seguro que hacen la mayoría de los lectores, si no tengo liquidez, yo ajusto inmediatamente mis gastos para que sean algo inferiores a mis ingresos. Porque sé que si gasto más de lo que ingreso, llegaré a un punto en el que no podré pagar, y además tendré una deuda que estaré arrastrando hasta que pueda ir devolviendo el dinero.
Y procuro no engañarme a mí mismo. Me explicaré: imaginemos que vivo en una comunidad de vecinos y somos 4 en la escalera. Cuando quiero saber el estado de mis cuentas, no digo que debo el 100 % de lo que ganamos los 4 vecinos. Y si se me desfasan las cuentas no pienso que lo que he gastado de más es el 6 % de lo que ganamos los 4 vecinos, sino que lo refiero en todo caso a lo que ingreso yo solo (que en porcentaje sería bastante más).
Ahora veamos cómo son las cuentas del Estado usando una unidad U que equivale a
1 U = mil millones de euros.
Los datos son aproximados y redondeados para que sea fácil la comparación o visualización del problema. Lo que me interesa son los órdenes de magnitud. Si me equivoco en algo, corríjanme.
Este año los ingresos brutos de España, no del Estado, sino de todos los agentes económicos (lo que se conoce como PIB o Producto Interior Bruto), es de cerca de 1.050 U. (Esto serían los ingresos de los 4 vecinos de la hipotética escalera). El déficit del Estado real de las cuentas públicas (que siguiendo el ejemplo es ‘sólo’ de uno de los 4 vecinos, el Estado), será en torno a 6,3 % del PIB. Y la deuda el Estado (es decir, de ese único vecino, no de los todos), alcanzará un valor que se va aproximando de 950 U, del orden del 90 % del PIB. En otras palabras, la deuda de un vecino, el Estado, se aproxima a lo que ganan todos los vecinos en un año. Hasta aquí es lo que nos suelen decir en las noticias. ¿Por qué no lo dicen en términos de ingresos del Estado? Analicemos lo que significan. Un déficit del orden del 6,3 % de 1.050 son unas 65 U (65.000 millones de €). No lo suelen airear mucho, pero los gastos del Estado (de ese único vecino muy gastador porque tiene tantos compromisos) son del orden de 320 U. O sea: el Estado de cada 320 U que gasta, ingresará 65 U menos (= 255 U). O lo que es lo mismo: de cada 5 € que gasta, ingresará uno menos, solo 4 €. Y su deuda es ya del orden de 3,7 veces lo que puede ingresar en un año (= 950/255). Los intereses anuales de esta deuda, los pagamos los contribuyentes (o sea: ustedes y yo) y cuestan ya casi 40 U.
Si de repente se decidiera algo que es imposible: que el Estado no gastara ni un euro más y siguiera teniendo intactos sus ingresos y los dedicara ‘todos’ a pagar la deuda, sin pagar pensiones, ni hiciera ninguna obra pública, no mantuviera el ejército y fuerzas del orden, ni hiciera ninguna infraestructura, ni pagara a los funcionarios, ni a los políticos, aún así tardaríamos casi 4 años usted y yo (a los que no nos han preguntado), en devolver todo lo que se debe. Esta situación trasladada a una economía familiar sería insostenible. No se puede resignar uno a gastar más de lo que ingresa. Por eso es tan importante reducir el déficit y equilibrar las cuentas. Porque mientras no seamos capaces de dejar de aumentar la bola de la deuda, estamos empeorando nuestra situación y la de los que vienen luego. Nos dicen las cosas de forma que no nos enteramos. Pero basta con ver los datos en crudo y coger la calculadora para hacerse una idea más exacta de lo que pasa.
Queda claro por qué es preciso que se adelgace la estructura del Estado, para disminuir el gasto en todo lo que sea prescindible, que pagamos con cargo a los impuestos. Porque mientras estemos ahogados con impuestos es muy difícil coger impulso y crear riqueza.
Good readinng