El Hostal de San Marcos de León
Hay cosas que funcionan bien y que dan mucha satisfacción a su clientela, como los hoteles de la red de Paradores.
El Hostal de San Marcos es el hotel que la red de Paradores tiene en León. Con una fachada renacentista, originariamente ‘hospital’ para los peregrinos del camino de Santiago, fue derribado para levantar un convento en el siglo XVI, ampliado en el XVIII. El edificio incluye un claustro, un museo y una iglesia, con muebles, tapices y cuadros de la época, muchos recuperados de otros edificios.
Con una enorme explanada ajardinada enfrente, desde la que se contempla todo el esplendor de su fachada y situado al lado del río Bernesga, que cruza de norte a sur el borde de la ciudad. Tiene en un flanco el Jardín de Quevedo. Está a un paso del Auditorio Ciudad de León y del Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León (MUSAC). Muy cerca del centro histórico donde se puede contemplar y disfrutar de la catedral gótica más bonita de España, junto con la de Burgos, la ‘Pulchra Leonina’. O la amplia oferta gastronómica y de ocio del centro histórico.
Sorprende positivamente por su calidad el servicio y la amabilidad de su personal, siempre con una sonrisa. Y por la calidad de su cocina. Es el lujo basado en la sencillez de las cosas bien hechas. Con un nivel de precios semejante al de los hoteles modernos de su entorno.
Es una muestra de la excelencia en un sector ya de por si muy competitivo, como es el turístico español. Los paradores emplean edificios o enclaves históricos, dotándoles de una nueva vida y uso, para disfrute del viajero. Son un ejemplo de como podemos contribuir a levantar un país milenario, llamado España, dando al mundo una oferta de calidad y de servicio bien hecho, con la amabilidad que nos caracteriza y en la que no nos gana nadie. Y, para que conste, no cobro comisión. 🙂
NOTA: Este es un resumen del artículo de opinión publicado en Castellón Información, con permiso de su autor, al que se han añadido las 15 imágenes que se muestran.