Paella valenciana de pollo y conejo / Valencian paella with chicken and rabbit
Ahora que estamos a principio de año, y mientras se resuelven o no los problemas económicos de la patria, os pongo una receta de paella, que os puede mantener entretenidos y hacer olvidar un poco los malos ratos.
La paella valenciana no tiene una única norma ya que hay diversas formas de realizarla. Aquí se presenta la de pollo y conejo que hacemos en casa todos los domingos de verano, cerca de esas tres palmeras.
La paella es una comida que no sale cara, permite que todos coman a su gusto cuando hay invitados, eligiendo lo que sabemos que les agrada a cada uno en el momento de servir los platos y trae enseguida a la mesa la sensación de fiesta. Por tanto contribuye al ahorro doméstico y es un recurso muy socorrido para celebrar las reuniones familiares, creando un ambiente de bienestar, que se requiere en esos casos.
La receta está incluída en este archivo PDF:1y2tres-Paella de pollo y conejo
La he puesto en español y en inglés para fomentar la comprensión de nuestra cultura.
Podéis introducir variantes a vuestro gusto. Espero que la disfrutéis y agradezco vuestros comentarios, tanto aquí como en el Twitter.
Ché que buena pinta. En mi casa se hace igual pero SIN pimiento.
Acabo de editar el post dejando más claro que esta es «una» receta (la que se emplea en nuestra casa) y no pretende ser «la» receta de la paella. También he corregido el PDF poniendo 1/2 pollo en los ingredientes, ya que un pollo entero puede resultar excesivo para cuatro personas.
Cuando no se tienen todos los ingredientes de la paella «perfecta», en la práctica se introducen variantes, cambiando la proporción o composición de alguna de las carnes o de las verduras, según tengamos en casa. Recuerdo con deléite una paella de pollo y conejo que hicimos en Benimuslem, cerca de Alcira en el mes de abril, en la que pusimos habas tiernas y alcachofas acabadas de recolectar, que años más tarde aún me parece exquisita. De lo que no soy partidario es de mezclar la carne con el pescado o marisco. Tampoco de poner cebolla o ajo como ponen algunos. En cuanto al mito del agua, no he notado ninguna diferencia de emplear una u otra clase. Del fuego, la paella que más me hizo sufrir fué una que hicimos con leña en el campo, por lo que no podía controlar bien el fuego. Desde entonces soy un firme partidario del gas butano, con el fogón que se ve en las imágenes.
Lo que ha de ser exacto y es una constante es la cocción del arroz, que ha de quedar suelto, sin quemarse y sin caldo en 20 minutos y la gracia de la paella consiste en manejar el fuego de forma que se consiga ese objetivo.
Se admiten comentarios y opiniones. Gracias por vuestro interés.
Club Molt Distingit Cuiner
clubmoltdistingitcuiner@hotmail.com
Valencia (España)
Señores:
Don Juan B. Viñals Cebriá, Presidente del Club Molt Distingit Cuiner, quien desde hace años se ha encargado de divulgar por todo el universo gastronómico nos dice-
“La Paella, con nuestra receta, se debe de comportarse como un alimento para los sentidos que se funde lentamente –para prolongar el gozo- en la lengua e impregna el paladar. La sola acción de llevarse a la boca la paella supone para los que gusta saborear las –exquisiteces- casi una experiencia mística. La paella ha sido y es, para los más exigentes un alimento más divino que humano, tienta, deleita, reconforta, y su ancestral receta se inscribe dentro de los más puros cánones de la acreditada dieta valenciana o mediterránea, nadie puede alcanzar eminencia de buen sibarita, si antes no ha experimentado el placer de saborear la paella con cuchara de madera.
Aunque solamente sea para dejar constancia del anacronismo que supone para el cocinero purista las llamadas paellas mixtas, al igual que otras, las que son un amasijo de demenciales ingredientes propios de cocineros inexpertos, igualmente que las multitudinarias, donde por medio de cadenas y plataformas de hierro se preparan una profusión de raciones de paella. Y las llamadas “populares” que se condimentan con unos hierros triangulares en el suelo de las calles. Por lo tanto todas esas irreverentes muestras culinarias, nada tienen que ver con aquellas paellas que antaño se cocinaban con tanta solemnidad, ceremonial, y boato siempre unidas a los grandes acontecimientos de índole santoral, o familiar de los señores de la huerta, después de la mano de la burguesía capitalina se integró en los círculos artísticos y culturales de Alicante, Castellón y Valencia” (Traducido del valenciano)
INGREDIENTES EXACTOS Y PRECISOS
(para 4 personas):
500 gr. de pollo
500 gr. de conejo
250 gr. de bajoca (judía verde ancha)
200 gr. de garrofó (judía blanca ancha)
100 gr. de tavella
100 gr. de tomate natural maduro
400 gr. de arroz
100 CC. de aceite de oliva virgen
Azafrán o colorante alimentario amarillo
Sal
Pimentón colorado
Romero.
Arroz: Son preferibles los arroces Denominación de Valencia, de las variedades Senia o Bomba, (grano medio o corto). Nunca utilice arroz de grano largo, porque absorbe menos caldo y no resulta tan gustoso
Agua, (Queremos romper un mito, por los análisis realizados por personas experimentadas y de toda mi confianza estoy en condiciones de asegurar que todas las aguas potables son buenas para condimentar la paella valenciana).
Infusión de Romero. (No coloquen tal cual la rama de romero en la Paella, hace vulgar y, sus briznas molestan al buen gourmet).
Nota: No digan nunca paellera, paellera es la mujer que hace la paella. Por cuanto que tanto el continente como el contenido su verdadero nombre es: Paella.
Fundamento de la Paella Valenciana (Paella de la Parreta), breve extracto del libro V-1007-07, de la genuina recepta (receta).