La formación de la pareja: la reproducción más perfecta, placeres sexuales, placeres sociales

En el supuesto de formación de una pareja de manera espontánea y libre, sin excesiva coacción social ¿porqué la vida en pareja es más estable y equilibrada que la vida individual?

La respuesta es que en la formación de una pareja estable y no coaccionada están involucrados varios de los actos más gratificantes de la conducta humana. Es posible satisfacer simultáneamente los siguientes objetivos:

1. La posibilidad de la propia reproducción física y de nuestro ideal (particular o social) que es el cónyuge. Además todos los placeres relativos a los mecanismos que llevan a ella: sexualidad y crianza de los hijos.

2. La Reproducción Cultural, facilitada por una aproximación previa en las fases primeras de creación de la pareja en la que mediante el mecanismo del enamoramiento se han roto algunas de las defensas que de manera natural se disponen habitualmente para evitar la admisión de las opiniones o modelos de otras personas.

3. Todas las demás ventajas y acciones que pueden llevarse a cabo por la simple asociación con otras personas, y que consiste fundamentalmente en vivir con menos esfuerzo, como estudiaremos con detalle en lo que continua.

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