Renovando el PC
Estamos en primavera, el día alarga, hay más tiempo para pruebas y descubres que tu PC ya no es lo que era. Es momento de renovar, sin gastar mucho dinero.
Hay una operación que se asemeja, trasladado a la escala de lo que es un PC, a lo que sería un ‘trasplante de cerebro’ para el ser humano, que es cambiarle la placa base a la máquina. Pueden haber diversos motivos. El más común es que tu querido PC se ha vuelto obsoleto. Entonces la solución más económica es cambiarle la placa base. Naturalmente se ha de dotar a la placa de un procesador y de una memoria RAM. De esa forma aprovecharemos la caja, la fuente de alimentación y si tenemos suerte los discos. En PCBox, por ejemplo, hay una buena oferta de todo lo que hace falta y son muy amables ayudándote en el montaje si lo necesitas. Consulta presupuestos.

El PC ‘segundo’ desmontado con la ‘nueva’ placa base encima, heredada del ‘primero’, lista para ser integrada
Yo tengo un par de PCs, de forma que si en el mejor de ellos (el ‘primero’) le pongo una placa nueva, puedo emplear la anterior de ese equipo en el ‘segundo’ PC. Así que salvo todo el conjunto de placa+RAM y discos, de forma que ahora si se lo monto al ‘segundo’ PC, ‘creerá’ que es el ‘primero’. Hago la misma operación y salvo también la placa, la memoria y el disco duro del segundo para un ‘tercer’ equipo, que este ya no es mío sino de mi cuñado, y que es más viejo que los míos.
Como toda operación, estas tienen un riesgo. Hemos podido dañar algún componente o puede que haya alguna pieza que no es compatible.
En el disco duro está guardada la ‘personalidad’ del equipo. Si yo arranco un equipo en el que le he puesto la placa y disco que estaba en otro, se comporta como el primero.

La ‘nueva’ placa base procedente del ‘primer’ PC ya montada en lo que era el ‘segundo’. ¿Funcionará?
Montar las piezas es un proceso minucioso pero no tan difícil como para no estar al alcance de cualquier aficionado. Algo delicado es poner bien los cablecillos que conectan con el botón de arranque, porque si no, aún teniendo todas las piezas bien colocadas, el equipo no arrancará.
Antes de cerrar la caja, conviene hacer una prueba de los elementos esenciales para evitar montar y desmontar en vano.
La mayor satisfacción es ver que todo funciona. Si hemos hecho las cosas bien, insertando los componentes de nuestro anterior ordenador en este tendremos incluso el sistema operativo y todo funcionando. Aquí envío una prueba de vida de que el experimento ha funcionado.
El resultado final es que con un coste la mitad de lo que me supondría un nuevo ordenador, tendré la posibilidad de renovar tres. Eso si, es para estar entretenido tres tardes…
NOTA: Si no sabes lo que haces, mejor no intentes imitar lo que aquí se dice. En lugar de renovar un equipo obsoleto pero que funciona, puedes quedarte sin que funcione el ordenador y tener que gastar dinero en otro…