Mr. Clock, un adelantado de su tiempo
Mr Clock era un reloj de aparador con pasaporte andorrano pero nacionalizado tiempo atrás, ya con algunos años en sus mecanismos. Había descubierto por casualidad la manera de viajar en el tiempo y, en lugar de hacer lo que otros congéneres, dando sutilmente al día un par de segundos de demora o adelanto, se destacaba claramente, todos los días a la carrera, adelantando un par de minutos (!).
Insensible a los intentos de corrección, que se limitaban a alargar su péndulo, pero sin entender su pasión aventurera, se las arreglaba siempre para anticiparse a los acontecimientos. En ese sentido era sin duda un adelantado en su época. Lo que viene siendo un precursor.
Inevitablemente, con esta estrategia, se convirtió, con el paso del tiempo, en un ser de otro tiempo (una especie de futuro imperfecto, como algo que será y no acaba de ser), aburriéndose siempre en este tiempo nuestro, esperando eternamente para conocer el final de las historias, final que nunca acababa de llegar a tiempo a su momento, dos minutos al día más alejado de la realidad (salvo las correcciones de su dueño), y siendo él además un eterno incomprendido…